Vallejo y Jackson blindan a Llaitul tras su declaración sobre planificación de sabotaje: indican que no se perseguirán las ideas terroristas
Los ministros Camila Vallejo y Giorgio Jackson han decidido blindar al líder terrorista, Héctor Llaitul, con quien comparten afinidad ideológica, a pesar de que el indigenista hiciera noticia hace poco por sus declaraciones en los que reconoce que el rol de su organización, la Coordinadora Arauco-Malleco (CAM), es el de hacer sabotaje a maquinaria para causar devastación económica en la región, dejando en claro que seguirán operando bajo esa lógica, con lo cual se somete al terror y a la pobreza a miles de chilenos.
La comunista Camila Vallejo declaró que el gobierno que comanda la ultraizquierda ya tiene una “postura fijada” sobre Llaitul y que no habrá cambios en la decisión de no interponer querellas contra Llaitul, a pesar de las demandas ciudadanas por justicia y restitución del Estado de Derecho, lo cual es imposible con la impunidad del líder guerrillero que se pasea generando terror en la zona afectada por su organización.
La comunista descartó de plano cualquier discusión respecto de los fines de Llaitul y se replegó a argumentar que solo los factores técnicos a nivel judicial serán los importantes, en tal sentido aseguró: "Hemos fijado una posición y en esto no hay cambios al respecto. Hay investigaciones en curso y hay querellas presentadas, y por lo tanto esperamos que respecto a estos delitos o posibles delitos sea la Fiscalía la que determine las acciones y las responsabilidades".
Además, para intentar tranquilizar a la opinión pública, agregó: "el Ministerio Público ya se encuentra con una investigación producto que el Gobierno de Chile ya es querellante respecto a las sanciones de la CAM".
Por su parte, el frenteamplista Giorgio Jackson se limitó a reiterar lo que el propio presidente, el neomarxista Gabriel Boric, ya había dicho sobre Llaitul, que sus ideas no serán perseguidas. Para Jackson, las amenazas terroristas son parte del debate sano de ideas, por lo cual afirmó que perseguir a Llaitul por sus dichos “es muy propio […] en los regímenes autoritarios, cuando lo que se hace es tratar de perseguir, criminalizar, por lo que haya dicho una persona”, así, complementó: “Lo que no hemos hecho, tal como lo dijo el Presidente, este no es un Gobierno que vaya a perseguir las ideas y eso es una línea que baja desde el Presidente en adelante”.
Además, indicó: “No es sano que sean los gobiernos los que tengan que perseguir penalmente a las personas”, frente a lo cual añadió también para calmar a la opinión pública: “si es que existe un incendio, un ataque incendiario, un ataque a las personas, el uso de armas y que se tengan las pruebas para poder hacer una querella, este Gobierno sí lo va a hacer”.