Las ilusiones de los chilenos en manos de los políticos

Ilustración: Chile +R
Por: El Coto
Un avasallador triunfo tuvo la opción del “apruebo” a una nueva constitución el domingo recién pasado. Una especie de triunfo tribal, como si fuera un ritual religioso, fue lo que se vio en las calles tras el asomo de la victoria de la opción preferente de Sebastián Piñera y de la mayoría de los políticos. Pero, aun así, es como si el tiempo del debate se hubiera congelado a dos días de su triunfo. ¿Se ganó el “apruebo”, pero que viene ahora?
Muchas imágenes en redes sociales han salido a la luz por parte de los votantes del Apruebo llamando a que esto no debe ser escrito por los políticos si no que por personas comunes y corrientes, o esos llamados independientes, bueno, al parecer no quisieron escuchar las advertencias que se venían exponiendo durante estos últimos meses explicando el por qué “el pueblo” no escribiría esta nueva constitución. Lo que sí se puede sacar en limpio de algo que será positivo, es que los adherentes al “apruebo”, los politicos y compañía, ya no tendrán la cara para responsabilizar a terceros por sus malas decisiones. Se acabó lo de revivir a Augusto Pinochet y su constitución, aunque en realidad van a cambiar es la de Ricardo Lagos. Se acabó el eslogan de que aquí no hay representatividad, se acabó el seguir culpando al mejor modelo que Chile ha tenido, se acabó culpar a los empresarios y a esos malévolos que defienden al libre mercado.
Hoy la responsabilidad recae en un 80% de los adherentes al “apruebo”, pero ya solo a dos días algunos se están dando cuenta de las mentiras que se les vendieron y que votaron con el estomago y no con la cabeza racional. Políticos como Heraldo Muñoz ya salieron en televisión diciendo que esto no será una receta mágica y que no solucionará rápidamente los problemas que aquejan a los chilenos. Gabriel Boric desfigurando el concepto de los “independientes” y listas con posibles constituyentes como Izkia Siches, Jorge Baradit, Alejandra Matus, Daniel Stingo, José Maza, Alberto Mayol, Fernando Atria, Lucia Lopez, etc. Si no somos sordos o ciegos, nos podemos dar cuenta fácilmente que no hay nombres que no conozcamos o esas tías Juanitas que supuestamente pasarían de vender sopaipillas a escribir nuestra Carta Magna.
Además de eso se habla sobre que Chile tendrá el primer proceso constituyente paritario en la historia, o sea mitad hombres y mitad mujeres, pero sin importar si son o no personas preparadas para dicha labor. Tras el inicio de este proceso veremos como esa excitación que los adherentes al “apruebo” tenían hace dos días, se irá apagando de apoco cuando logren ver que sus esperanzas e ilusiones no serán satisfechas, sus problemas no mejoraran y tendrán menos plata en sus bolsillos.
Como estas expectativas no se solucionaran con esta solución mágica, se estará pavimentando la calle para el nuevo estallido 2.0 y más violencia debido a que estas ilusiones serán robadas por el enorme poder que les entregaron a las fuerzas políticas. El éxito de Chile en los últimos años fue tan grande, que a muchos se les olvidó lo mal que alguna vez estuvo este país, y los más jóvenes que votaron en este plebiscito lo demostraron. En nuestro país se vivirá un proceso sumamente complejo, donde existirá una cantidad enorme de material para seguir informando a los ciudadanos. Sabemos que aquí nos acompañan y apoyan chilenos que son ciudadanos orgullosos, honestos y que desean un país mejor a punta de lo que hace mejor a los países, perseverancia y trabajo. Patriotas que el domingo por la noche seguramente tuvieron horas ácidas, se encontraban desmoralizados, con ganas de llorar o con irse del país, pero los llamo a no dejar caer los brazos, a no dejar de difundir y apoyar a los medios independientes.
Los invito a seguir luchando por nuestro país para que sigamos mejorando día a día, aunque la contienda sea desigual. Después de ver la enorme frustración de los adherentes del “apruebo”, quizás no nos sigan viendo como los locos, o los que aplican las campañas del terror, si no los que tomaron un tiempo para analizar lo que estaba en juego y como podríamos mejorar las cosas de una forma real. Los países caen cuando su institucionalidad se ve debilitada, y lo que debemos defender es eso, para que Chile no caiga en un modelo de gobierno y modelo económico que nos llevaron a unos de los peores años de nuestra historia. Así que, a seguir informando, seguir formando y no perder lo que nos hace chilenos, la resiliencia ante la adversidad. De las derrotas nacen los hombres fuertes, los conductores, los nuevos líderes y la resistencia.