Senadora ultraizquierdista Campillai exige a la Convención Constitucional la abolición del Senado
La insurgente trotskista Fabiola Campillai, que hoy oficia como senadora, ha levantado expresamente a la presidente de la Convención Constitucional, la también ultraizquierdista María Elisa Quintero, para que sea abolido prontamente el Senado de la República en el marco de la redacción de una nueva constitución para Chile.
Campillai, quien usó las malformaciones que recibió tras un enfrentamiento insurgente contra carabineros para posicionarse mediáticamente y ser electa, se encuentra molesta por los obstáculos que le presentan los senadores de derecha y centroderecha para la tramitación de un indulto para los terroristas que se encuentran presos por atacar a compatriotas chilenos durante la insurrección de 2019.
Según la marxista, desde la derecha habrían intentado negociar extender el indulto a los militares que se encuentran recluidos en Punta Peuco, especialmente responsabilizó al senador socialcristiano, Manuel José Ossandón, de haber hecho esta solicitud.
Para Campillai esto fue una falta de respeto, indicó: “Así se me condicionó el voto para sacar a nuestros compañeros que ni siquiera han hecho nada al lado de esos asesinos que hoy están muriendo, pero que jamás pensaron en el sufrimiento cuando mataban y violaban sin ninguna conciencia”.
Por su parte, el centrista Ossandón replicó: “yo jamás he condicionado mi voto porque estoy en contra del indulto y eso se lo informé. Pero también estoy de acuerdo que no puede ser una prisión preventiva y una condena para jóvenes, y esto hay que verlo rápido y caso a caso […] En otra conversación, en el mismo tema, humanamente hablamos y le planteé que aquí debiera existir indultos para todos los enfermos terminales de todas las cárceles de Chile, inclusive Punta Peuco”.
A pesar de ello, la insurgente cargó sus dardos contra la institución misma del Senado, de manera de facilitar sin contrapesos las propuestas de la ultraizquierda que encuentran un obstáculo en la Cámara Alta, sus palabras dramáticas y de chantaje emocional al respecto fueron: “Están en contra de dar siquiera una señal de humanidad, el Senado no puede existir”.
Por ello, dirigió su solicitud a la Convención, institución manejada por la ultraizquierda, la cual visitó durante el presente jueves 24 de marzo: “Que el Senado se elimine, por favor. No lo necesitamos. Ahí se entrampan las leyes y no quieren reparar todo lo que pasó, no quieren”.