Por esta razón Joe Biden podría no terminar su primer período en la Casa Blanca

“¿Qué estoy haciendo aquí?”. Ésta ha sido la pregunta del presidente de Estados Unidos, Joe Biden, mientras ofrecía un discurso en Texas el pasado viernes 26, tras el terrible temporal de nieve que ha asolado el Estado.

Su aparente desorientación tuvo lugar tras pronunciar mal los nombres de los miembros del Congreso de Texas y otros demócratas y de repente perdió el hilo de lo que decía y se pregunto qué estaba "haciendo aquí", para a continuación seguir su intervención pública con supuesta normalidad, aunque con cierto balbuceo y lapsus mentales.

El debate sobre su deterioro cognitivo fue una constante durante la campaña electoral por las pausas, lapsus y confusiones del dirigente demócrata. También dentro de su propio partido durante las primarias presidenciales.

Los rumores sobre la salud mental de Biden siguen aumentando a medida que pasa los días. Son ya varios los vídeos que se han hecho virales en los que Biden, siempre acompañado con alguien, aparece completamente desorientado. Incluso la más reciente en la Casa Blanca Junto a Pelosi en la que recibía instrucciones detrás de la cámara mientras el decía que respondería preguntas porque es lo que “se supone” debía hacer.

Es del dominio público e indisimulable que Biden no está bien y que por eso no le dejan aparecer en ruedas de prensa a él solo. Le llevan en todas sus intervenciones públicas como a una marioneta y cortan enseguida cuando la cosa se complica y a Biden se le empieza a “ir la pinza”, como se dice habitualmente.

El caso es que se van a cumplir dos meses el próximo 20 de marzo desde que jurara su puesto y los periodistas preguntan continuamente sobre esa rueda de prensa en solitario que todos los predecesores de Biden ya habrían ofrecido.

Sus 15 predecesores celebraron ruedas de prensa en solitario dentro de los 33 días posteriores a sus respectivas presidencias. El expresidente Donald Trump respondió preguntas después de 27 días en el cargo, mientras que Barack Obama celebró una conferencia de prensa formal a los 20 días de su primer mandato.

Si bien Biden desde el 20 de enero ha celebrado 38 sesiones de “preguntas y respuestas breves” con periodistas, según Martha Joynt Kumar, directora del Proyecto de Transición de la Casa Blanca , sus respuestas sobre una amplia gama de cuestiones han sido hasta ahora breves.

Preguntada sobre este asunto, la Jefa de Prensa de la Casa Blanca, Jen Psaki, se niega a comprometerse a fechas y a concretar nada, esquivando de una forma descarada las respuestas. El hecho es que a Biden no se le quiere dejar solo y asistimos todos atónitos a un hecho claro y completamente irregular y preocupante porque está claro que Biden no está bien de lo suyo y parece que cada día va a peor. Solo cabe preguntarse en qué día será presentada la Enmienda 25 por su propia vicepresidente y será esta quien asuma el cargo de Presidente ante la evidente incapacidad de Biden.

Mientras, ya se especula con la vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris, como su sustituta.