Políticos disparan el gasto para 2021: anarquistas y activistas de derechos humanos y de la "cultura" son los más beneficiados
La comisión mixta del parlamento despachó la noche del pasado miércoles 11 de noviembre el proyecto de Presupuesto 2021, el cual pasará ahora a la Cámara de Diputados y que contiene la cantidad de dinero fiscal extraído de los bolsillos de todos los chilenos que será usado por los políticos en el complejo escenario de ofertones y eventuales recortes a su favor asociados al proceso insurreccional de corte socialista que avanza en el país.
En materia de interior, lograron reponerse los fondos variables y glosas del programa para Carabineros, por 14 votos a favor, 4 en contra y 1 abstención, a pesar de los reclamos de la izquierda que intentaba castigar a Carabineros por haber defendido a la población durante la insurrección anarco-comunista que beneficiaba sus intereses partidarios. La izquierda busca por todos los medios desarticular a Carabineros para dejar a las personas a merced de las guerrillas urbana y rural que azotan al país.
El radical Giorgio Jackson del partido neomarxista Revolución Democrática amenazó con perjudicar a Carabineros durante el debate en la Cámara Baja indicando: “Hoy no hay garantías de que los recursos con que cuenta Carabineros sean bien utilizados administrativamente ni efectos para lo que debiera ser su rol principal, que es proteger a la población. Es más, parte del armamento que compra está fuera de los estándares internacionales, en materia de seguridad y salud pública, así que insistiremos en rechazar el presupuesto a Carabineros”. Desde la perspectiva de Jackson, Carabineros no debe usar la fuerza contra los anarquistas que estén destruyendo, saqueando y asesinando a civiles.
En absoluto contraste, uno de los lobbys que más han perjudicado a Carabineros durante la insurrección, al punto de desarmarlos hasta exponerlos a la muerte por parte de los guerrilleros, nos referimos al lobby de derechos humanos representado por el Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH), resultó tremendamente favorecido con un suculento aumento de presupuesto sacado de nuestros bolsillos debido al relato y la presión política en curso, ya que básicamente operan como activistas de izquierda que dan soporte callejero al lumpen para defenderlo de las fuerzas de orden y permitirles seguir causando daños a civiles.
El diputado Leopoldo Pérez (RN) cuestionó coherentemente esta absurda partida para el INDH explicando: “piden contratar 25 abogados para un número determinado de causas, y si uno compara eso con lo que hacen los fiscales del Ministerio Público, es bastante mínima la carga de trabajo por abogado.”
Por ahora fueron rechazadas las partidas del Ministerio de Ciencias y Tecnología y del Ministerio de Cultura, ya que la izquierda presionará por subir exageradamente ambos presupuestos, criticando que el gobierno estaba dando muy poco dinero a estos organismos.
El más crítico en este sentido es el Ministerio de Cultura, organización ineficiente que sirve como caja de pago para los colectivos y partidos de izquierda radical que tienen las redes culturales saturadas en activistas y partícipes de la insurrección totalitaria en curso. Derivar grandes sumas de dinero extraídas de la población empobrecida del país a estos activistas es un gran negocio que la izquierda no puede dejar pasar.
En materia de salud el debate se centró en torno a otro ridículo gasto que costeará el Estado con los impuestos que pagamos en nuestros productos más básicos: el programa de Recuperación de Trauma Ocular que corresponde a tratamientos gratis para terroristas que vieron dañados sus ojos mientras cometían vejámenes contra la patria durante la insurrección. Muchas de estas lesiones oculares fueron causadas por otros anarquistas utilizando todo tipo de armamento barbárico para asesinar a Carabineros.