Piñera se vende a la farsa indigenista y propone feriado de "año nuevo mapuche"
Un nuevo acto de complicidad con la revolución antichilena en curso ha cometido el presidente centroizquierdista de Chile, Sebastián Piñera, esta vez ha entrado a satisfacer una demanda simbólica de los colectivos indigenistas que, imbuidos por la ideología de izquierda multiculturalista, busca deconstruir la nación chilena y erradicar el pasado que nos conecta con la tradición occidental, con el fin de permitir la llegada de un nuevo tipo de régimen colectivista radical.
Esta vez el socialdemócrata Piñera, completamente dócil a las guerrillas narcoterroristas que operan en el sur de Chile asesinando a inocentes, ha indicado que enviará un proyecto de ley para hacer del 24 de junio un feriado, pues sería el día del “we tripantu” o “año nuevo mapuche”, fecha que es usada por los colectivos antipatriotas para exacerbar a aquellos que se autoidentifican como araucanos como excusa para generar discordia social y demoler el sistema institucional y económico del país.
Con esta iniciativa Piñera fomentará la narrativa narcoindigenista que les permitirá a estos grupos avanzar territorialmente imponiendo el caos, la miseria y ataques homicidas en nombre de sus “causas”, todo ello con el beneplácito de la población adoctrinada por esta ideología populista y el lobby de derechos humanos vinculado al globalismo que se encarga de que las policías no puedan detener de ninguna manera a los terroristas en su avance insurreccional.
Expertos han indicado que en el actual contexto de guerra molecular, de la cual el indigenismo es una de sus máquinas de guerra principales, son estas concesiones simbólicas las que van deconstruyendo y debilitando el espíritu de la población, haciéndola cada vez más entreguista de sus libertades para el momento en el que estos grupos de violencia política asalten el poder e instauren su nueva forma de socialismo totalitario. Por ende, estas medidas están lejos de ser sanas o cosméticas.
Cabe destacar que hasta ahora el día 24 de junio es oficialmente el importante día de San Juan en el calendario católico, por lo cual esta modificación también tiene un hondo significado a nivel metafísico.