Partido Comunista obtiene el poder total en puestos clave del Ministerio de Defensa

Bajo la atenta mirada de su líder, Guillermo Teillier, varios militantes comunistas han enquistado el poder en puestos clave de la Subsecretaría para las Fuerzas Armadas, entidad del Ministerio de Defensa que tiene un rol clave en la conducción política de las fuerzas militares de la nación.

Tal como ha revelado el medio El Líbero, el subsecretario Galo Eidelstein, muy cercano al jerarca Teillier y también miembro del Partido Comunista, ha colocado en puestos clave de la Subsecretaría a varios compañeros de su partido. Por ejemplo, Jaime Insunza, quien ejerce como asesor gremial de Eidelstein, estuvo vinculado con él en el escándalo del desfalco de la Universidad Arcis, así como también Patricio Palma, otro hombre fuerte de Teillier (miembro del Comité Central del partido) que ahora es asesor y que es ex gerente general de la Inmobiliaria Libertad, manejada por el Partido Comunista.

También están Luis Lobos, jefe de gabinete de Eidelstein y miembro del Comité Central del Partido Comunista, Manuel Da Corte, periodista chavista venezolano y militante del PC en Chile, Roberto Campos, militante histórico contratado como asesor y Tania Saez, jefa de División Administrativa, levantada directamente de las Juventudes Comunistas.

El Líbero también destaca otros agentes que no son del PC pero sí son de la ultraizquierda, por ejemplo Carlos Chong, jefe de la División de Presupuesto y Finanzas y hermano de la cuestionada fiscal Ximena Chong, famosa por perseguir a Carabineros y defender a insurrectos en casos judiciales. Destacan también Juan Valdivia, jefe de la Dirección Jurídica que es un ex abogado del Instituto Nacional de Derechos Humanos, y Erick Layana como Jefe da la División de Asuntos Institucionales, quien fuera jefe de gabinete del diputado de Revolución Democrática, Jorge Brito.

Desde el nombramiento de la nieta de Salvador Allende, Maya Fernández, como ministra de defensa, se manifestó una postura revanchista por parte de la extrema izquierda contra las Fuerzas Armadas debido a su rol trascendental en el derrocamiento del régimen socialista en 1973. Por su parte, el Partido Comunista, especialmente de la mano de Teillier, Daniel Jadue y Hugo Gutiérrez, ha hecho especial lobby en la transformación de los militares en una milicia de carácter “popular”, al estilo de los países socialistas. Este tipo de milicias tiene su enfoque en la persecución política y no en la defensa de la República tal como la conocemos.

Eidelstein, por su parte, en particular, ha tenido una cierta trayectoria académica estudiando las formas en las que se pueden refundar las Fuerzas Armadas para ser convertidas en ese tipo de milicias. El enfoque que se le da a este fenómeno es mediante el cuestionamiento a las violaciones a los derechos humanos cometidas por parte de militares a militantes comunistas. En esto es calve la teoría de los derechos humanos de la izquierda, según la cual una violación a los derechos humanos es un acto que solo pueden cometer agentes del Estado contra agentes revolucionarios.

En este sentido, el posicionamiento de Eidelstein en la Subsecretaría para las Fuerzas Armadas como un feudo del Partido Comunista abre la interrogante de la forma en la cual implementará políticas que lleven a ese fin.