COLUMNA | El segundo alzamiento insurreccional, por Alexis López Tapia y Pablo C.

Foto: Blacklisted
Por Pablo C. y Alexis López Tapia
El pasado 24 de octubre, un día antes del Plebiscito, “El movimiento político Unión Nacional de Izquierda Revolucionaria (UNIR)[1] de Los Ríos, confirmó la presentación de un recurso de protección para anular el Plebiscito, afirmando que “el Acuerdo Político por la Paz y la reforma constitucional para realizar el proceso de participación, son arbitrarios y discriminatorios”. En ese contexto, el objetivo era “invalidar la consulta” que se realizó el pasado domingo.
Por ello, cuestionaron la ley 21.200, que establece el procedimiento para la elaboración de una nueva Constitución de la República, indicando que el “Acuerdo Político por la Paz” en el marco del alzamiento insurreccional de octubre, fue “arbitrario e ilegal”.
Asimismo, -en este marco, agregaron que “los únicos que pueden ejercer el Poder Constituyente Originario son los colegisladores, excluyendo de manera arbitraria e ilegal de este ejercicio al resto de los ciudadanos para crear dicha ley de Reforma Constitucional”.
Sin embargo, ¡esto no es nuevo!, pues ya lo sabíamos desde un inicio y toda la campaña ciudadana por el Rechazo lo advirtió: LA NUEVA CONSTITUCIÓN LE DARÁ MÁS PODER A LOS POLÍTICOS.
Hasta ahora, sólo hemos constatado lo que era obvio. Sin embargo, este problema abre nuevos escenarios en vistas de las excesivamente altas y falsas expectativas que levantó la campaña del Apruebo, logrando así obtener el 78,27% de los votos.
El pasado 26 de octubre, el Movimiento Juvenil Lautaro, a través de su Secretario General[2], señaló que “Se ha iniciado el Punto de Inflexión […] hasta las próximas elecciones Municipales y de constituyentes de abril próximo”. […] ”…cuyo resultante incidirá significativamente en las configuraciones de los escenarios futuros”. En ese plano, el Movimiento Popular, apunta que “tenemos la oportunidad histórica de ir avanzando contundentemente en la realización del Chile Popular, profundizando las posibilidades de la insurrección de masas”.
Por otra parte, respecto a la clase política que ganó el plebiscito, sostienen que “En vastos sectores populares se ha sembrado nuevamente una esperanza falsa” […] abriendo “ofertones de transformación que son verdaderos elefantes rosados”. Y que “la nueva carta magna, […] actualizará el marco regulatorio que necesita el capitalismo en su proceso de mutación”.
En vistas de este diagnóstico, el movimiento insurreccional propone explícitamente la reactivación de un segundo Alzamiento Insurreccional Horizontal:
Afirman: “Llegamos muy bien a la apertura del punto de inflexión, lo hacemos en protesta desbordada” […] A través de “un pueblo volcado en las calles, indómito ante las ofensivas de encauzar la rebeldía a las latitudes de esta democracia migajera. Los próximos seis meses han de ser muy intensos, las exigencias se acrecentarán y las voluntades hermosas de lucha tendrán que sobre exigirse en demasía”.
Este nuevo alzamiento, y toda la violencia asociada, tiene la necesidad de ir “instalando a la Revolución como alternativa real y sobre todo tocable, alcanzable” y que “el tren de olas de protestas populares azotando los diques del poder, debe continuar su andar”.
De acuerdo con sus palabras- “El proceso constituyente tiene sus días contados” […] “cual castillo de naipes se irá derrumbando y caerá a pedazos. En abril próximo se eligen constituyentes, instante donde los electos estarán directamente relacionados a los partidos políticos, lo que sin duda acrecentarán el malestar, el que se incrementará cuando se vea que todos los elefantes ofertados no son tal, que nunca existieron, porque como sabrán los elefantes rosados no existen”, afirman.
Por su parte, el Frente Patriótico Manuel Rodríguez en un post publicado el lunes en su página oficial en Facebook, titulado: “Las cartas están tiradas: Tiempo de Definiciones”, sostiene:
“El plebiscito no es una ofrenda del espectro político ni del gobierno asesino de Piñera, sino una conquista social, obtenida con la lucha diaria de estos últimos 372 días” […] Esta ritualidad, el plebiscito, es solo la expresión de resistencia de aquella mayoría pasiva que respalda a la mayoría activa que sale a la calle y que está dispuesta a poder materializar las demandas que se encuentran pendientes. El apruebo no es más que la expresión de rebeldía que afirma la movilización activa de la mayoría movilizada. La primera gran lección es que lo obtenido es fruto de la lucha callejera y por lo tanto esta misma, la lucha callejera no cesará mientras no estén satisfechas todas nuestras demandas”. Y agregan: “Es el momento de una ofensiva más contundente y de cerco, nacional e internacional político y social al gobierno de Piñera. Romper con la predica de pedir lo que creemos que nos pueden dar y pedir lo que nos merecemos y necesitamos, es la línea central de nuestro accionar en adelante”.
Al respecto, afirman que “El inicio de cualquier acuerdo social comienza con la liberación inmediata de los presos políticos del estallido”.
Y detallan 5 condiciones para avanzar hacia una nueva constitución:
1) Que renuncie Piñera
2) Gobierno de Emergencia
3) Plan de Emergencia Nacional
4) Asamblea Constituyente auto convocada desde los territorios
5) Dimisión del Congreso
Finalizan su comunicado sosteniendo: “Este itinerario/propuesta mínima, lo proponemos como el inicio de discusión de un plan de lucha para la conquista y posterior defensa de las conquistas populares”. Y afirman: “No soltaremos la calle hasta que renuncie”.
Por su parte, el mismo día del Plebiscito, la diputada Comunista Camila Vallejo envió un mensaje que inquietó en La Moneda: “Para llamar a la unidad hay que tener legitimidad”, dijo, al referirse al llamado del presidente Piñera tras sufragar.
Por su parte, el encargado de las relaciones políticas del PC, Juan Andrés Lagos, abordó la decisión del partido de empujar las movilizaciones sociales a partir de la misma noche del Plebiscito: “Después del plebiscito va a ser muy importante la movilización y la lucha social. Vamos a acompañar ese proceso y lo vamos a estar impulsando. El criterio de seguir la movilización ya está para que éste sea un proceso soberano y que cambie el modelo”.
Finalmente, y divulgado el amplio triunfo del “Apruebo”, el presidente del PC, Guillermo Teillier, marcó por la noche la posición oficial: “Aquí se ha expresado el pueblo y tenemos que dar una voz de interpretación de lo que está sucediendo. Lo que digan las organizaciones sociales indudablemente que lo vamos a apoyar. Que existan actos de violencia no puede paralizar la demanda social ni las manifestaciones”, agregando que el resultado del plebiscito es una señal de rechazo al Gobierno.
De este modo, queda en evidencia el conflicto principal que se ha venido desarrollando desde octubre del año pasado, que es el conflicto intra izquierda, entre los sectores insurreccionales, anti y a sistémicos, y la izquierda sistémica, particularmente los partidos políticos con representación parlamentaria, que negociaron con la derecha deconstruida el camino institucional hacia la Asamblea Constituyente.
En efecto, para el proceso insurreccional, y así lo habíamos venido adelantando en numerosas columnas de análisis y entrevistas, el “Acuerdo por la Paz Social y la nueva Constitución”, que llevó al Plebiscito y el triunfo del “Apruebo”, sólo constituye un “retraso” en la ofensiva violenta por la conquista del poder total, como de igual modo lo hubiese sido el triunfo del “Rechazo”. De allí que esos sectores hayan venido sosteniendo reiteradamente que se trató de un acuerdo “arbitrario y discriminatorio”, anticipando que las acciones insurreccionales continuarían su curso sin pausa ni freno como lo han venido haciendo.
De este modo, el enfrentamiento entre los sectores de la izquierda anti y a sistémica, y los movimientos políticos sin representación parlamentaria, con los partidos de la izquierda sistémica, constituye el principal conflicto político en desarrollo, y su resultado será determinante no sólo para el proceso constituyente, sino fundamentalmente, para el triunfo de la “Vía Violenta” o la “Vía Pacífica”, como método de la Revolución en curso.
En ese escenario, la capacidad de la derecha deconstruida para continuar negociando y cediendo, está determinado fundamentalmente por las acciones que lleve a cabo el gobierno de Sebastián Piñera para contener las acciones insurreccionales, y de este modo permitir la consolidación del proceso institucional, aunque para ello deban terminar por renunciar a los escasos principios que les van quedando en la redacción de la nueva Constitución.
Así, durante el próximo año asistiremos como espectadores al avance del proceso insurreccional como factor de coacción, mientras el Gobierno y la derecha deconstruida continúa cediendo todo ante la izquierda institucional, para intentar mantener una cuota mínima de poder, como factor de consenso.
Los Patriotas rechazamos el proceso constituyente, y lo seguiremos haciendo, por ser ilegítimo, completamente inválido e impuesto por la coacción, que ha generado falsas expectativas para nuestros compatriotas y ha dislocado nuestro sistema institucional, para finalmente apropiarse de él.
En síntesis, los políticos de izquierda y derecha, desde Piñera, Lavín, Desbordes y los Ossandón, pasando por Jiles y Jadué, hasta UKAMAU, se encargaron de desarrollar un placebo para intentar aplacar la violencia subversiva, cuyo efecto no durará por mucho tiempo.
Nosotros sabemos, desde la Patria Vieja que “tras las tinieblas viene la luz”, y por ello, continuaremos trabajando para que cada día más compatriotas se den cuenta de la farsa que nos impusieron, y se sumen al rechazo en el Plebiscito de salida.
Los Patriotas entendemos, conocemos y hemos venido anticipando largamente los nefastos resultados de imponer por coacción, una agenda política revolucionaria, violenta, desalmada y degradante, que seguirá su curso sin pausa ni freno.
Frente a todo esto, nuestro deber es defender a Chile, a nuestras Fuerzas Armadas y de Orden y a la República, oponiéndonos a la destrucción y transgresión de nuestra Tradición, de nuestra integridad, de nuestra identidad y de nuestra verdadera dignidad, soberanía y majestad como Nación.
Así nos tome el resto de nuestra vida, ¡la Revolución Molecular no vencerá!
¡Patria o Caos! No hay más bandos.
Bibliografía:
- Biobiochile.cl (2020) Agrupación de izquierda presenta recurso en Corte de Valdivia para anular el Plebiscito. Por Nicolás Díaz. La información es de Yonatan Jara. Sábado 24 de octubre, 2020.
- https://www.biobiochile.cl/noticias/nacional/region-de-los-rios/2020/10/24/agrupacion-de-izquierda-presenta-recurso-en-corte-de-valdivia-para-anular-el-plebiscito.shtml
- Fernando. NO TODO LO QUE BRILLA ES ORO. Secretario General Lautaro. Movimiento Juvenil Lautaro. 26 de octubre de 2020.
- Frente Patriótico Manuel Rodríguez, página oficial en Facebook:
- https://www.facebook.com/283773945302544/posts/1310844505928811/
- Acuerdo por la Paz Social y la nueva Constitución:
- https://www.bcn.cl/procesoconstituyente/detalle_cronograma?id=f_cronograma-1
- PC dice que intensificarán las protestas tras resultado del plebiscito:
- https://www.ex-ante.cl/pc-dice-que-intensificaran-las-protestas-tras-resultado-del-plebiscito/
[1] Biobiochile.cl (2020) Agrupación de izquierda presenta recurso en Corte de Valdivia para anular el Plebiscito. Por Nicolás Díaz. La información es de Yonatan Jara. Sábado 24 de octubre, 2020.
[2] Fernando. NO TODO LO QUE BRILLA ES ORO. Secretario General Lautaro. Movimiento Juvenil Lautaro. 26 de octubre de 2020.