Aumentan la probabilidad de fraude electoral en el plebiscito ilegítimo de octubre
La comisión de Constitución del Senado ya aprobó un proyecto de reforma constitucional emitido por el Gobierno que dará facultades exclusivas al SERVEL con la excusa de realizar en octubre un “plebiscito seguro”, esto en el marco de la pandemia de virus chino que supuestamente exige modificar de forma radical todas las formas de interacción social.
Son varias las interrogantes que nos podemos hacer sobre la insistencia de los políticos por llevar a cabo esta votación que solo fue exigida a la fuerza por grupos minoritarios de la sociedad y que tendrá un costo de 30 mil millones de pesos sacados de los bolsillos de todos los chilenos; esto sin contar más encima las interrogantes que nos deja la irregular manera en la que se llevará a cabo utilizando estas excusas de índole sanitaria.
La propuesta del Gobierno acordada tras negociaciones con el SERVEL son las siguientes: modificaciones en cuanto a constitución e instalación de las mesas, extensión a 12 horas del funcionamiento de los locales de votación, medidas respecto de los útiles que se van a emplear, pero lo más complejo, medidas relativas a la presencia de apoderados de mesa y la nominación de vocales, lo que generaría un escenario perfecto para una orquestación política de irregularidades nunca antes vista en Chile.
Veámoslo así, la necesidad del llamado “distanciamiento social” hará más difícil a los ciudadanos presenciar que no se cometan irregularidades, especialmente dado que al extenderse las limitantes para ser vocal de mesa hay un eventual riesgo de que el Estado los termine designando de entre funcionarios públicos, los cuales, aunque no podemos generalizar, podrían tener intereses creados respecto de un resultado que beneficie el estatismo y la irresponsabilidad fiscal.
Como si esto fuera poco, el diputado de Evópoli, Luciano Cruz-Coke, ha hecho oficialmente una solicitud al SERVEL de que permita la votación por correo o por otra plataforma a distancia para las personas contagiadas con coronavirus, es decir, otra medida extraña a nuestro sistema de votación tradicional que podría ser letal al realizarse de forma poco transparente e improvisada, eso sin contar que la detección de este virus ha sido bastante cuestionada en sus métodos en el pasado.
Pero el problema no se limita a la posibilidad de un fraude electoral en Chile que podría ser propio de un país bananero, sino que además los sectores patrióticos que se han alineado en torno a la opción del RECHAZO se han visto sometidos a un asedio comunicacional de profundo desgaste con el fin de desmoralizar, desactivar y finalmente silenciar su capacidad de organización, esto porque tanto a los políticos como a los sectores insurreccionales y vinculados a los medios de prensa y del mundo de la cultura les convendría profundamente un cambio constitucional.
Incluso desde la centroderecha ha habido un asedio constante a los patriotas para llamarlos a desistir de votar RECHAZO y sumarse a la idea de cambiar la constitución, lo cual solo reforzaría el discurso radical de ultraizquierda que fomenta la caída de Chile en el socialismo y la instalación de un desgobierno altamente burocrático, de fuerte connotación antipatriota y de mano blanda al anarquismo y el terrorismo a lo largo del país.
En ese sentido han sido gravísimas las confusas palabras del Ministro del Interior, Víctor Pérez, quien comentó que no importa la elección de octubre y que el cambio constitucional iría igual, ósea, ya estaría pactado eventualmente desde la presión insurreccional y la clase política que busca seguir profesando del Estado.
Pero hay otro ejemplo que es necesario constatar también, en un medio digital progresista, un liberal de centro que se presenta con un seudónimo, publicó una columna de opinión llena de errores en las que llamaba a la derecha a aceptar que el apruebo ya ganó.
Usando una retórica llena de imprecisiones, este sujeto pone de ejemplo el hecho de que la opción RECHAZO no tenga tan buen desempeño en encuestas, lo cual es absolutamente refutable.
En Colombia, en 2016, las encuestas dijeron que entre un 55% y un 70% aproximadamente de los colombianos aprobaría en un plebiscito a favor de un acuerdo de paz entre el Estado y la organización terrorista narcomarxista FARC, finalmente, con un 50,21% de los votos ganó el RECHAZO.
Ese mismo año, en Gran Bretaña, las encuestas indicaban que entre un 51% y un 55% de los británicos preferían quedarse en el entramado globalista de la Unión Europea, finalmente ganó la opción BREXIT con un 51,9%.
También ese año, las encuestas de Estados Unidos indicaban que la candidata izquierdista Hillary Clinton aventajaba hasta por 10% al candidato patriota Donald Trump, lo que le haría a este último totalmente imposible conseguir la victoria, sin embargo, eso fue precisamente lo que sucedió y hoy Donald Trump ha tenido un próspero gobierno en la Casa Blanca.
Es hora de ser más responsables con los llamados a acallar a los votantes, y es hora también de instar a las personas a no dejarse amedrentar y defender hasta las últimas consecuencias sus ideales, especialmente si son ideales inspirados en la familia, la libertad y la patria.
Véalo con sus propios ojos:
Proyecto de ley que da poderes extraordinarios al SERVEL: https://bit.ly/3kK4wkI
La exigencia del diputado Cruz-Coke: https://bit.ly/3gWFkFk
Las confusas palabras del Ministro Pérez: https://bit.ly/3iHbepI
La columna distribuida en un medio progresista que llama a los partidarios del RECHAZO a rendirse: https://bit.ly/2PTUFKQ